BUENOS AIRES.- Tras los enfrentamientos entre la policía, gente sin techo y presuntos vecinos que provocaron oficialmente tres muertos en el sur de la Ciudad de Buenos Aires, regresó ayer la calma al Parque Indoamericano, cercado por Gendarmería Nacional y ocupado por personas que reclaman una vivienda.
"Todo está en calma", afirmó la jueza Elena Liberatori luego de recorrer el predio y, después de conversar con algunas de las cientos de familias establecidas. La información de que hubo una cuarta persona muerta no fue confirmada.
La magistrada comprobó que los ocupantes del lugar recibieron en las últimas horas alimento, agua y medicamentos. A su vez, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación relevó la cantidad de los habitantes y sus necesidades.
Unos 250 censistas iniciaron las tareas, y se estima que las mismas seguirán hasta hoy. En tanto, más de 1.000 personas, en su mayoría provenientes de villas de emergencia de la zona sur porteña y del conurbano bonaerense, permanecen en los terrenos de ese predio.
Liberatori dijo que su presencia tiene como objetivo generar "un ámbito" en el que "se puedan arbitrar" soluciones y "avenir intereses contrapuestos". La jueza opinó que es una cuestión "lamentable" que la asistencia sanitaria y de seguridad brindada en las últimas horas a las familias se haya decidido "a partir de las muertes" ocurridas en el lugar. Además, aseveró que se está cumpliendo "muy bien" en el lugar la orden de pacificación que dictó en los últimos días tras los disturbios y enfrentamientos.
Después de la muerte de al menos tres personas en violentos intentos de desalojo en Villa Soldati, una de las zonas más pobres de la capital, Gendarmería nacional cercó este sábado el Parque Indoamericano. La intervención de las fuerzas de seguridad fue ordenada por el Gobierno nacional tras una reunión ese día con el alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, para evitar la prolongación del conflicto.
La violencia comenzó el martes, cuando la Policía Federal, bajo la órbita del Gobierno nacional, y la Policía Metropolitana, que responde a la Ciudad, intentaron desalojar del Parque Indoamericano a un grupo de familias sin techo que se instaló en el predio en reclamo de un plan de viviendas. Luego del accionar policial que causó un muerto, la zona quedó sin vigilancia por una disputa entre esos gobiernos.
Ante la ausencia policial, el jueves hubo enfrentamientos entre los okupas -mayormente inmigrantes bolivianos y paraguayos- que ocuparon ilegalmente el Parque y presuntos vecinos que reclaman que se retiren del lugar. El saldo fue de otros dos muertos.
En la tarde del viernes aparecieron en la zona unas 500 personas envueltas en banderas argentinas. Se identificaron como vecinos y, tras amenazar a la prensa para que no registrara los hechos, ingresaron al parque para desalojar a los ocupantes. Quemaron las viviendas precarias que habían levantado en el lugar, dejando al menos cuatro heridos graves. Ayer, otro grupos de vecinos provocó algunos desmanes menores, que fueron contenidos y controlados por la Prefectura. (DyN-NA-Especial)